No es necesario refrigerar Prokey durante su transporte o almacenado, pero es recomendable consumirlo frío, está mucho más rico.

La caducidad de los refrescos Prokey es de un año desde que se elaboran. Su sabor va evolucionando ligeramente con el tiempo pero en realidad no se estropea. Al no contener proteínas y grasas, como sí tiene el kéfir de leche, no hay elementos o compuestos que se puedan estropear.

Con el paso del tiempo los microorganismos del kéfir van pasando a un estado que se conoce como latencia. Es decir, están vivos pero dormidos. Cuando más tiempo llevan en estado latente más difícil es que muestren su poder probiótico. A pesar de ello mantienen su poder prebiótico. Con el paso del tiempo Prokey se vuelve más prebiótico que probiótico pero sigue siendo un refresco igual de sano.

Definitivamente no, el azúcar es el alimento de las células del kéfir. Se pone al inicio de la fermentación y cuando ha finalizado el azúcar que resta sin fermentar es mínimo, no más del 0,5% respecto al volumen del refresco.

Se puede hacer kéfir de agua con otro edulcorante en vez del azúcar como la miel o el ágave, pero entonces el cultivo de kéfir crece mucho menos y no lo consume todo, resultando en productos dulces y con menor poder probiótico.

Prokey es un refresco probiótico. Contiene agua, microorganismos y sustancias derivadas de la acción de éstos así como compuestos disueltos procedentes del limón, los dátiles y/o las infusiones que empleamos en su elaboración. Así que su digestión es muy sencilla y su absorción rápida.

En el caso del kéfir de leche, además que el número de microorganismos por ml es mucho más bajo que en el kéfir de agua, tienen gran cantidad de nutrientes a absorber y digerir (como grasas y proteínas). Así, el kéfir de leche es un alimento probiótico, con un poder probiótico menor que el kéfir de agua, pero con más capacidad nutritiva (aporta calorías y macronutrientes).

Prokey ha sido concebido como un refresco. Aunque puede pautarse un consumo determinado en base al caso clínico de cada persona no es algo que nosotros hagamos y recomendamos guiarnos por un buen profesional de la salud, nutricionista preferentemente.

Se puede tomar tanto Prokey como apetezca, es un refresco. Pero nuestra recomendación es que no interfiera en tu correcta alimentación. No sustituyas comidas por Prokey.

No, Prokey no es más que un refresco que además tiene propiedades saludables. Un consumo elevado o en personas sensibles puede producir ventosidades fruto de la acción de los microorganismos que contiene, pero no irá más allá.

Prokey no tiene lactosa, no usamos lácteos en su elaboración. Pero en el refresco puede haber pequeñas cantidades de sorbitol y fructosa procedentes del limón y los dátiles que empleamos en la fermentación. Aunque los cultivos vivos del kéfir pueden ayudar en la digestión de estos compuestos, si el grado de sensibilidad a estos azúcares es muy alto, mejor hacer una pequeña prueba de tolerancia antes de beber mucha cantidad de Prokey.

Sí, los niños pueden tomar tanto kéfir de agua como deseen, especialmente Prokey, ya que está libre del poco alcohol que sí puede aparecer en los kéfires caseros. Es un alimento fermentado más, como un yogurt o el chucrut.

Sí, las embarazadas y lactantes pueden tomar tanto kéfir de agua como deseen, especialmente Prokey, ya que está libre del poco alcohol que sí puede aparecer en los kéfires caseros. Es un alimento fermentado más, como un yogurt o el chucrut.

Todo el mundo puede tomar kéfir de agua, desde bebés hasta la gente mayor. El kéfir de agua no es más que un refresco isontónico que además tiene propiedades probióticas. Así que estamos juntando en una misma bebidalas propiedades saludables de los refrescos isotónicos (calma la sed, rehidrata) con las de un yogur (mejora la flora intestinal y potencia el sistema inmunitario). Pero, a diferencia de una isotónica, no tiene cantidades importantes de azúcar o edulcorantes, y a diferencia de un yogur, no tiene lactosa ni proteínas lácteas.

Se puede tomar kéfir de agua, Prokey, siempre que se quiera. Si se toma como un simple refresco la ocasión sería la misma en la que tomaríamos estos; haciendo deporte, junto con la comida, a media tarde, compartiendo con amigos … Si queremos tomar kéfir de agua como ayuda probiótica tenemos que probar en qué momento nos ayuda más. De forma ideal se tomaría con la digestión hecha, para que pueda llegar al intestino lo más rápidamente posible. Los diferentes momentos del día en que tenemos el estómago más o menos vacío son al levantarnos, a media mañana, a media tarde y antes de meternos en la cama. Tomando kéfir de agua y observándonos en estos 4 momentos podremos ver cuando nos sienta mejor.

No es una pregunta sencilla de responder qué sabor tiene el kéfir de agua. Un kéfir bien hecho debe tener un sabor ligeramente cítrico y, aunque el contenido en azúcares es bajo, dulzón. Si el kéfir se aromatiza con infusiones o con zumos de fruta el sabor puede ser exactamente el de un refresco convencional, de naranja, limón, mango, melón, coco, menta, … siempre con su gas y el aroma característico de la fermentación del kéfir. Ahora bien, si está mal hecho, podemos encontrarnos con productos desde muy dulces a increíblemente ácidos, casi como vinagre. Incluso, una fermentación a medias puede dar lugar al propio sabor del agua pero como ensuciada con algo dulce aunque no identificable.

En general el kéfir de agua tiene más poder probiótico al estar compuesto por bacterias lácticas principalmente. En el caso del kombucha, predominan las levaduras, y estas no crecen tanto como las bacterias. El kéfir de agua es un mejor producto probiótico mientras la kombucha es de una gran ayuda digestiva.

El kéfir de agua casero tiene algo de alcohol, de un 0,5 a un 2% fruto de la fermentación alcohólica que realizan algunas levaduras presentes en los gránulos de kéfir.

El cultivo que empleamos para elaborar Prokey no tiene levaduras que realicen fermentación alcohólica así que Prokey es un refresco sin alcohol.

Ciertamente se puede usar Prokey como cultivo iniciador para intentar fermentar kéfir de agua en casa. Pero dado que su composición microbiana es diferente que la ideal del cultivo iniciador, la bebida resultante no será Prokey y es posible que ni siquiera tenga un sabor agradable. Para hacer kéfir de agua lo correcto es partir de un cultivo iniciador y no de la bebida ya hecha.

Sí que tiene pequeñas cantidades. Pero hay que ir más allá, muchos problemas causados por la histamina de los alimentos son debidos a disbiosis intestinal (mal estado del intestino), y el kéfir y los probióticos en general pueden ayudar en estas situaciones.

Candida es un género de levaduras presente en el kéfir de agua. Lo componen mucha sespecies, desde la conocida por patógena Candida albicans a otras como Candida boidinii o Candida membranaefaciens, ambas presentes en las aceitunas de mesa. Así que no hay que preocuparse porqué el kéfir de agua no contiene la especie potencialmente patógena Candida albicans y además ayuda a regular la flora intestinal, por lo que puede ser beneficioso en caso de padecer de cándida.